Sabíamos que el virus Zika podía afectar a mujeres embarazadas y producir microcefalia en el feto. También sabíamos que el virus se había aislado en el semen de varones y que podía transmitirse vía sexual además de por la picadura de mosquitos. Por este motivo, las autoridades sanitarias recomiendan durante los 6 meses después de viajar a una zona endémica utilizar preservativo para no transmitir el virus si se han infectado, y evitar un embarazo con riesgo de microcefalia.
Pero los hombres pueden no ser meros portadores del Zika, también podrían sufrir sus consecuencias. Unos investigadores del Washington University School of Medicine acaban de publicar en la prestigiosa revista Nature un estudio realizado sobre ratones a los que inyectaron el virus Zika. Al cabo de una semana vieron que el virus había llegado a los testículos desde el torrente sanguíneo, y al cabo de dos semanas observaron que muchas células de Sertoli y células germinales (espermatogonias y espermatocitos) morían, destruyéndose los túbulos seminíferos. A las 6 semanas el recuento de espermatozoides se había reducido 10 veces, y la producción de testosterona también había caído significativamente.
Hasta la fecha, el Zika es de los pocos microorganismos que se ha podido demostrar que atraviesan la barrera hemato-testicular. Los autores creen que el daño sobre el testículo puede ser irreversible ya que las células de Sertoli no se regeneran. Y lo peor, aunque solo se trata de un estudio sobre ratones, creen que en humanos se pueden reproducir los resultados. Aunque desde luego advierten que habría que estudiarlo en regiones endémicas. Además, los investigadores afirman que los afectados no se darían cuenta de su problema de fertilidad hasta años o décadas después de la infección, en el momento en el buscaran tener hijo
Recordad, precaución si viajáis a Centroamérica, América del Sur y El Caribe. Utilizad repelentes para evitar picaduras de mosquito y, por supuesto, preservativo durante y hasta 6 meses después del viaje.
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