Las infecciones de orina son muy frecuentes, sobre todo en las mujeres. Cuando los episodios se repiten una y otra vez puede llegar a ser bastante desesperante para quien sufre los molestos síntomas, continuamente tiene que acudir a urgencias y tiene que tomar antibiótico durante muchos días al año. La versión masculina de las cistitis recurrentes, menos frecuente, sería la prostatitis crónica.
Recientemente se ha presentado en Madrid un estudio sobre más de 300 mujeres con cistitis recurrentes (2 episodios en los últimos 6 meses o 3 en el útimo año). A las mujeres se les aplicó Uromune®, una vacuna de administración sublingual durante 3 meses, a base de bacterias inactivadas de diferentes tipos. Estas bacterias no producen enfermedad, pero sí estimulan la producción de anticuerpos y por tanto potencian las defensas del cuerpo. La vacuna resultó altamente efectiva a la hora de disminuir los episodios de infección urinaria en este grupo de mujeres.
Existe más evidencia científica internacional en los últimos años a favor de la utilización de este tipo de vacunas en mujeres, y la mayoría de los urólogos ya hemos incorporado esta modalidad de tratamiento en nuestra consulta diaria.
¿Y en los hombres? En los hombres la vacuna se ha estudiado menos, pero los primeros resultados en grupos pequeños de pacientes ya muestran eficacia en el caso de las prostatitis crónicas bacterianas.
El otro día os hablaba del problema de las resistencias a los antibióticos, su pérdida de eficacia y la alerta que ha lanzado la OMS para restringir su uso. Pues bien, la vacuna no solo resulta muy eficaz para el tratamiento de las infecciones de orina recurrentes, sino que además reduce mucho el consumo de antibióticos y, por tanto, contribuye a combatir las resistencias bacterianas.
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