Por último, y quizás más importante, los ciclistas pueden estar en riesgo de sufrir problemas sexuales o de salud reproductiva, también por el mismo motivo de presión sobre el área perineal.

La presión por parte del sillín, la postura sobre la bicicleta, o el sobrepeso, son algunos de los factores que más influyen para que aparezcan este tipo de problemas, tanto los sensitivos, las molestias prostáticas, o las alteraciones sexuales o reproductivas. ¿Cómo prevenirlo?

Los sillines antiprostáticos están diseñados para disminuir la presión en la zona central, donde se encuentra la próstata. En este enlace tenéis algunos modelos de las principales marcas, ISM, Duopower, selle SMP, Sele Italia o Selle Royal:

http://www.neopren.es/271-sillines-antiprostaticos–

Respondiendo a la pregunta, sobre si son o no eficaces, lo cierto es que los sillines con apertura central sí contribuyen a reducir la presión en la zona perineal, y cuanto mayor sea la apertura mejor. Además, es muy importante que el sillín tenga la anchura adecuada para conseguir un buen apoyo de los isquiones. Otra alternativa es utilizar sillines sin nariz. Lo malo de estos sillines es que pueden resultar más incómodos al poner toda la presión únicamente sobre los isquiones, pero también son eficaces.

Otro aspecto importante, además del modelo acanalado o con apertura central, con nariz o sin nariz, es la inclinación del sillín. Es básico poner el sillín con una ligera inclinación hacia delante. Además, se debe tener en cuenta que las siguientes situaciones también aumentan la presión perineal: sillín muy alto, sillín muy retrasado, manillar demasiado bajo respecto al sillín y manillar demasiado alejado.

Toda esta información es la que he podido recopilar sobre los sillines antiprostáticos. Espero que os sea de utilidad.

(Dedico esta publicación a mis amigos ciclistas como Alfredo Mus, Pere Estarellas, Francisco Muñoz y, especialmente, a Arnau Sabaté, que me dio la idea de hablar sobre este tema)