La sífilis o lúes es una enfermedad de transmisión sexual producida por una bacteria en forma de espiral denominada Treponema pallidum. Se dice que la sífilis vino desde América con la tripulación de Colón, de ahí que la enfermedad fuera conocida como el «mal español». Durante mucho tiempo causó estragos, pero con el descubrimiento de la penicilina por Alexander Fleming en los años 40, la incidencia disminuyó mucho. En los últimos años la OMS ha alertado del recrudecimiento de las estadísticas, con un total de 12 millones de nuevos casos al año. En España en 2015 hubo más de 3000 nuevos casos declarados.

La sífilis cursa en 4 fases:

1. Sífilis primaria: úlcera genital dura e indolora que se conoce como «chancro sifilítico». Aparece entre 1 y 5 semanas tras el contacto sexual (3 semanas de media). A veces puede pasar desapercibido.
2. Sífilis secundaria: produce una erupción en la piel y las mucosas, acompañada de dolor de cabeza y en articulaciones, fiebre y malestar general. Puede curarse sin tratamiento, pero dando paso a una sífilis latente.
3. Sífilis latente: la bacteria permanece en el cuerpo durante un tiempo que puede ser desde 1 hasta 20 años sin dar ningún síntoma.
4. Sífilis terciaria o sífilis tardía: tras varios años aparecen lesiones cerebrales, demencia, ceguera, trastornos de la marcha, cardiopatía, afectación ósea, etc. Puede incluso producir la muerte.

 

El diagnóstico puede hacerse a partir de una úlcera genital sospechosa, o mediante una serología sanguínea que muestra anticuerpos por haber tenido contacto con la bacteria. El tratamiento es la penicilina y el pronóstico es bueno en las primeras fases de la enfermedad. Afortunadamente, hoy día en nuestro medio se diagnostican pocos casos de sífilis terciaria.

Hay que alertar de que la sífilis puede transmitirse mediante sexo vaginal y anal principalmente, siendo también posible por sexo oral. La clave es la prevención, con el uso de preservativo. También puede transmitirse de forma vertical de la madre al hijo durante el embarazo, produciendo en el bebé la llamada sífilis congénita o lues connata.