Veamos algunos datos reveladores:
- Los hombres visitamos el médico un 24% menos que las mujeres.
- Tenemos un 28% más de probabilidades de ingresar por insuficiencia cardíaca congestiva, un 24% más por neumonía, o un 32% más por complicaciones derivadas de la diabetes.
- Nos hacemos controles de colesterol un 22% menos.
Son solo algunos ejemplos para poner de manifiesto lo «dejados» que somos en temas de salud. El Dr. L. M. Verbrugge, en su libro «Género y salud: hipótesis y evidencias», expone algunos argumentos para explicar estas diferencias. Los hombres tenemos más hábitos de riesgo como el tabaco o el alcohol. Por otro lado, participamos menos que las mujeres en programas de prevención y promoción de salud y en el screening de determinadas enfermedades.
Los expertos coinciden en que la educación en salud es especialmente necesaria en los hombres, y que los medios digitales son una excelente herramienta para ello. Los hombres somos menos proclives a acudir al médico a contarle nuestros problemas, o a compartirlos con nuestros amigos. Pero por contra, tenemos mayor inclinación para usar la tecnología, internet o redes sociales para informarnos.
Los divulgadores de salud del hombre como el Dr. Eduardo García-Cruz de Barcelona ( http://buff.ly/1dZ9030 ), el Dr. Romero Otero de Madrid ( http://buff.ly/1dZ91E4 ) o yo mismo, sabemos muy bien de la herramienta tan importante que nos brinda la tecnología actual para educar en salud. Y es por eso que estamos ahí dándoos cada día la brasa en las redes sociales.
Somos el sexo débil… Enfermamos más y morimos antes. Y quizás sea por nuestra culpa ¡No dejes pasar tus revisiones!
Deja un comentario