Hace unos meses hablé de la nocturia en “¿Es normal levantarse a orinar por la noche?”. Os decía que hacerlo de forma esporádica puede ser normal, pero no es normal tener que levantarse de forma habitual 1, 2 o más veces. Y os explicaba las causas de este problema, la más frecuente en las mujeres la vejiga hiperactiva, y en los hombres la hiperplasia benigna de próstata. Hoy vamos a ver que con frecuencia la nocturia puede no dejar descansar correctamente por la noche, produciendo un trastorno crónico del sueño. Y que este trastorno esconde un riesgo cardiovascular.

Un sueño de mala calidad o insuficiente afecta negativamente a nuestra calidad de vida, a nuestras actividades diarias, a nuestro estado mental, a nuestro humor y a nuestra productividad. Esto a corto plazo, pero el sueño insuficiente está demostrado que a largo plazo produce un mayor riesgo de sufrir enfermedades metabólicas o cardiovasculares como la diabetes, la obesidad, la hipertensión, la enfermedad coronaria o los infartos cerebrales, e incluso se ha relacionado con una muerte más temprana.

¿Por qué se producen estos riesgos? Según explica el Dr Donald L. Bliwise, neurólogo que ha investigado sobre el sueño durante los últimos 40 años, si hay interrupciones durante las primeras 3-4 horas del sueño (primer sueño de ondas lentas), se producen alteraciones en la sensibilidad a la insulina y se atenúa la bajada nocturna de la tensión arterial. Esto explica el mayor riesgo de diabetes, obesidad, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.

El Dr Bliwise afirma que los pacientes con nocturia de 2 o más veces, con frecuencia se levantan la primera vez a las 2,5 horas de haberse acostado, reduciendo significativamente la primera fase de ondas lentas del sueño, la más importante para un buen descanso y para evitar el riesgo cardiovascular. Según sus estudios los fármacos como los hipnóticos (pastillas para dormir) pueden aumentar esta primera fase 25 minutos, pero la desmopresina (hormona antidiurética) es mucho más eficaz porque la prolonga 76 minutos de media.

Pues bien, ya véis que levantarse a orinar por la noche no solo puede ser molesto, sino que además puede tener consecuencias a largo plazo por la interrupción del sueño. Deberíais consultar el problema con vuestro urólogo aunque no os genere mucha molestia.